La generosidad

La generosidad es otra de las virtudes del líder. Son generosos. Se dan, se entregan y sacan, de donde parece que no hay, lo que su equipo necesita en cada momento. Lo hacen como un mago, con su mejor sonrisa, con su mejor #ACTitud y, al final, se meten a la gente en su bolsillo.

La generosidad es dar sin esperar nada a cambio, aunque a algunos, la vida nos demuestra cada día que es cierto el dicho de que, cuanto más das, más recibes. Así que, a veces, o al menos yo lo hago, doy y doy, porque sé que, finalmente, vendrán insospechadas recompensas. Egoísmo puro ;).

En el mundo profesional, en tu trabajo, te tienes que dar, tienes que entregar lo mejor de ti, aunque en determinados momentos no tengas todas las ganas. Debes sacar tu mejor #ACTitud y ser generoso con los que te rodean, especialmente con tus compañeros y equipo.

Y si hablamos de dar, pues justo hoy he querido publicar esta reflexión porque es el cumpleaños de Andrés de la Ossa, al que le quiero agradecer y regalar esta pequeña felicitación, escrita y que ha motivado esta reflexión. Porque Andrés es alguien que se da y que nos da. Es una excelente persona. Es un gran profesional. Es un buen cabeza de familia. Además, es un tío generoso que siempre nos regala su mejor sonrisa, su ejemplar #ACTitud y la mayoría de las fotos que acompañan estos textos. Hoy, compinchándome con Ainhoa, su mujer, le hemos robado una foto para encabezar el artículo. De entre todas las que me ha pasado, he elegido esa, porque sale él, con la grandeza de su sencillez y generosidad en la inmensidad de la mar.

Así que, en voz alta te digo ¡FELICIDADES, ANDRÉS! Felicidades por ser cómo eres, por darte como te das y por estar aquí con tus mejores sonrisas y fotos. Y GRACIAS por formar parte de este proyecto tan bonito.

Para poder disfrutar de sus fotos, Andrés, como el mago, como el líder, es generoso. Por ello es previsor, trabajador, constante, tiene formación, posee experiencia y atesora habilidades para ello, pero eso no es todo, su generosidad y su #ACTitud son las que marcan la diferencia.

Si seguimos con la comparación, Andrés, como el líder generoso, sabe lo que hay que hacer y el objetivo al que hay que llegar. Previamente, se ha preparado, ha hecho muchas fotos, algunas buenas y otras no tanto, ha seleccionado las de mayor potencial. Posteriormente, entre esas, busca cuál es la mejor para el fin pretendido, revisa, selecciona y pone ya toda la carne en el asador en aportar la mejor para cada ocasión.

Todos podemos tener una cámara, poner el ojo y disparar, pero no logramos esas fotos con alma que Andrés logra. Él lo hace con corazón, con todo su alma, con amor. Su resultado la diferencia.

Pues bien, ¿qué pasa entonces en la empresa? Pues en tus manos está que pase lo mismo. Con los mismos medios físicos y humanos, los resultados pueden ser muy diferentes. Ahí entra el juego tu papel de líder generoso, para poder llegar a generar esa #EmpresaconAlma diferenciadora.

Y ahora te animo a que, en tu liderazgo, adoptes esa #ACTitud generosa y te des como Andrés hace, siempre con su mejor sonrisa.